lunes, 1 de abril de 2013

Un café con Mamá Inés


Una negrita linda, voluptuosa y carismática recibe a cubanos y foráneos con un humeante trago criollo en la calle Enramadas esquina Pérez Carbó. ¿Su nombre? Mamá Inés y de África vino durante la esclavitud para quedarse enraizada en la cultura cubana.
Todavía no se sabe cómo ella se trasladó desde el barrio de Jesús María, en La Habana, hasta la céntrica arteria oriental, donde hoy ofrece su sabor y simpatía a través del Café Literario que lleva su nombre.
A un año y seis meses de inaugurado, "Mamá Inés" se mantiene entre los sitios de preferencia del pueblo de Santiago de Cuba, gracias a su oferta diversa y aceptable servicio.
Único en su tipo en la provincia, abre sus puertas 24 horas para vender alrededor de 15 combinaciones de café; más té, leche y tostadas, ingresando diariamente unos $325 en moneda CUP a la empresa de Gastronomía Municipal.
La instalación pone a disposición de los clientes, durante su estancia, ejemplares de las editoriales Oriente, Unión, y Caserón, la Revista SIC y la prensa local. Asimismo, martes, jueves y sábados a las 4pm y los últimos viernes de cada mes en ese horario, poetas y amantes de la literatura se adueñan del sitio; donde se han realizado encuentros con artistas de otras provincias como Guantánamo, Holguín y Camagüey.  
Los visitantes no solo degustan infusiones de buena calidad, también escuchan un icono de cubanía: el tango congo ¡Ay! Mamá Inés, inmortalizado en la voz de Ignacio Villa, más conocido como Bola de Nieve.
Los orígenes de la pieza musical se remontan a 1868, cuando era parte de un número de comparsa. Años más tarde, el 29 de septiembre de 1927, su autor, el compositor y arreglista Eliseo Grenet, la regalaba al mundo en el estreno de la zarzuela Niña Rita o La Habana de 1830, en el teatro habanero Regina.
En la obra salía Rita Montaner, ataviada con traje de calesero colonial. Mientras lustraba zapatos, la actriz cantaba una melodía de ritmo criollo y pegajoso que recordaba a sus antepasados africanos.
La invitación está hecha, el que desee disfrutar de una excelente bebida  y una buena compañía debe llegarse al café literario santiaguero, de donde saldrá tarareando: "Ay Mamá Inés, ay Mamá Inés, todos los negros tomamos café".
María de las Mercedes Rodríguez Puzo
P.D.: Sugiero el café a la crema, mi preferido.
 








2 comentarios:

  1. Bueno para la próxima visita a Cuba tendre que ir a tomar un trago y participar de la cultura local en el café de Mamá Inés. Felicdades un articulo muy motivador. Efrén

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  2. Gracias Efren! Te esperamos entonces.

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