jueves, 9 de mayo de 2013

Una vida dedicada a sus pacientes


El segundo martes de mayo se celebra el Día Mundial del Asma, y siguiendo la premisa que legó al mundo José Martí, Héroe Nacional y Apóstol de todos los cubanos, de "Honor a quien honor merece", quise recordar a una mujer que ha dedicado su vida a la atención de personas con este padecimiento en la provincia de Santiago de Cuba.
Sus 75 años de edad no limitan ni su agilidad ni su pericia, sigue atendiendo pacientes en el hospital Provincial Saturnino Lora, y en la  Sala de Rehabilitación Armando García con la misma intensidad de los tiempos mozos. Además, encuentra el tiempo para ser Profesora Auxiliar de Medicina Interna, y dirigir el Campamento de Rehabilitación y Educación a niños asmáticos Ernesto Ché Guevara.
No obstante, es más conocida por el jarabe expectorante que lleva su nombre, me refiero a la Dra. Nancy A. Nápoles Smith, quien con solo 15 primaveras se trasladó a la capital para trabajar y así ayudar a su humilde familia. Allí se vinculó a la lucha clandestina con la tarea de tirar proclamas revolucionarias cerca de la Estación de Policía No. 1 de La Habana Vieja, mientras estudiaba en el Colegio de Enfermería.
Tras obtener el título retornó a Santiago, iniciando la noble profesión en la sala de niños tuberculosos del hospital Ambrosio Grillo; en aquel entonces deseaba ser pediatra. Sin embargo, la vida le daría otra especialidad, al graduarse de Medicina en 1969, ante la carencia de tisiólogos que enfrentaba el país y su experiencia en el campo, le otorgaron la residencia directa en Neumología.
Poco a poco, Nancy iría tornándose en la gran doctora que hoy es, durante su residencia en Grillo hizo la fórmula del Jarabe de la Dra. Nápoles, y varios ensayos clínicos sobre la acción del propóleos en individuos con procesos respiratorios crónicos, especialmente el asma; el tratamiento con inefasma por extracto acuoso, y el anamú en tableta.
Siempre pensando en la pediatría, prestó servicios en la Casa para niños de madres tuberculosas y dados de alta, ubicada en Punta Gorda y dirigida por las doctoras Melba Puzo y Silvia Jústiz. Luego, cuando fue designada Presidenta de la Comisión de Asma Provincial, dirigió el Campamento de niños asmáticos en Caletón Blanco que funcionó hasta la llegada del Período Especial.
Tiempo después, la Dra. Nápoles y otros profesionales en un proyecto conjunto de Salud Pública y el Ministerio de Educación reabrieron el mencionado campamento, sito esta vez en la Escuela Renato Guitart (Calle 11 esquina Carretera de Siboney), realizándose solo en los meses de julio y agosto para niños y niñas menores de 13 años. Proyecto que perdura actualmente y permite a los más pequeños aprender a vivir con su enfermedad y ejercitarse a través de la natación y el yoga; a la vez que educa a los padres sobre cómo ganar en calidad de vida.
Pero el quehacer de Nancy no termina aquí, desde hace tres décadas atiende el área de rehabilitación Lidia Almenares en el parque Abel Santamaría, que funciona lunes, miércoles y viernes; gracias a la cual muchos personas ya no toman medicamentos durante las crisis, sino que les basta con los ejercicios físicos.
Esta mujer, de carácter impactante y muy exigente, se ha propuesto dar todo de sí al servicio del pueblo santiaguero en la lucha contra las afecciones respiratorias, convencida de que con sensibilidad en el trato al paciente y disciplina se pueden ser un mejor profesional de la salud.

María de las Mercedes Rodríguez Puzo

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